Dice Diario de Navarra que hace una semana, el viernes pasado, comenzaron las obras del Tren de Alta Velocidad, a las que se desplazó el consejero de Fomento, Anai Astiz. Dos máquinas y un camión retiraban tierra, dejando una trinchera por la que discurrirían las vías. Ese día, también primero de la campaña electoral, numerosos periodistas cubrieron ese "momento histórico". Cuando se marcharon las cámaras, desaparecieron también las máquinas, ahí terminaron los trabajos. Así lo ha comprobado el diario de Navarra, que ha visitado el lugar todos los días de esta semana: ni han vuelto las máquinas ni se ha movido más tierra. Astiz estuvo acompañado por la directora general de Obras Públicas, Camino Bonafaux, además de los directores de obra del Gobierno de Navarra, y varios representantes de las dos empresas adjudicatarias: Comsa y Construcciones Mariezcurrena. Ese día, el consejero apostó por "acelerar" todo lo posible la ejecución de la obra para ser más competitivos que otras regiones. Mientras el consejero recibía alguna explicación de los técnicos, primero sobre plano y luego sobre el terreno, trabajaban dos máquinas -bulldozer y retroexcavadora- y un camión. Una extraía tierra de una zona que el camión trasladaba al lado opuesto de un camino para que la otra máquina la distribuyera en la zona por donde discurrirán las vías. Durante esa mañana, se trabajó en una zona de unos 20 metros de ancho por 100 de largo.
Tras la visita del consejero del viernes las máquinas han desaparecido. Diario de Navarra lo ha comprobado acudiendo al lugar desde el lunes 7, con terreno encharcado por las lluvias del fin de semana, hasta ayer -martes, miércoles y jueves fueron soleados y con el terreno seco-. Algunos días se acudió al lugar por la mañana y por la tarde sin ver ningún movimiento. Todavía se aprecian los montones de arena depositados el viernes, donde se mantienen las mismas huellas un día tras otro. Agricultores y vecinos que transitan esta zona también confirmaron que las máquinas sólo estuvieron trabajando el viernes, coincidiendo con la visita del consejero.
La visita del consejero en plena campaña electoral es cuestionable. La ley dice textualmente: "Desde la convocatoria de las elecciones y hasta la celebración de las mismas queda prohibido cualquier acto organizado o financiado directa o indirectamente por los poderes públicos, que contenga alusiones a las realizaciones o a los logros obtenidos".
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